La eliminación del Real Madrid en semifinales de Champions League ha dejado a varios señalados en el equipo blanco empezando por el técnico Carlo Ancelotti. El planteamiento del preparador italiano desnudó las debilidades de un equipo que no fue capaz de salir de su propio campo en la primera parte del duelo contra el Manchester City.
Carletto se vio completamente arrollado por un City que no escatimó esfuerzos en un partido donde los blancos no tuvieron capacidad de sorpresa ni plan B. A Ancelotti se le aparecen los fantasmas del año 2015 –cuando fue despedido tras ser subcampeón de Liga y semifinalista de Champions– tras dar una imagen de absoluta impotencia en el Etihad Stadium.
El entrenador tuvo parte de culpa de la derrota, pero no fue el único que no estuvo al nivel. Destacada para mal fue la actuación de un Karim Benzema que está a años luz de aquel que hace no tanto fue Balón de Oro. El delantero perdió balones divididos uno detrás de otro y apenas creó peligro sobre la portería de Ederson. El francés, ni mucho menos, estuvo a la altura de su pedigree.
Otro señalado de la contienda con el City fue un Luka Modric que estuvo impreciso en el campo no encontrando nunca su sitio. El hecho de no tener el balón hizo mella para que se vieran sus costuras físicas viéndose rebasado por Kevin de Bruyne y Bernardo Silva en múltiples acciones. Al croata se le vio más tiempo cayendo a cubrir el lateral zurdo que en su posición natural.
Toni Kroos, otro de los miembros de la Vieja Guardia, también quedó como uno de los señalados especialmente por su posicionamiento en los goles del City. El alemán no es un 5 válido para los partidos de máxima exigencia y se vio con claridad al verse rebasado por sus rivales.
El Real Madrid debe tomar una decisión con estos tres futbolistas que terminan contrato este próximo verano. En los planes iniciales del club estaba renovar a Modric, Kroos y Benzema, pero quizá este rendimiento en el partido más importante de la temporada no haga fáciles las cosas para ninguno de ellos.